¡Hazle caso a las señales! Sálvate del ACV

¡Hazle caso a las señales! Es el nombre de la campaña con la que queremos generar conciencia para que las personas se puedan cuidar del Accidente Cerebrovascular #ACV. Hablar de síntomas, factores de riesgo y la incorporación de conductas sanas para nuestra vida ayuda a protegerse de esta emergencia médica. 

Los invitamos a conocer la campaña:

 

 

Consumo de alcohol aumenta riesgo de un accidente cerebrovascular

Una investigación publicada en el mes de abril por la revista británica The Lancet declara que ingerir bebidas alcohólicas aumenta la presión arterial y las posibilidades de sufrir un derrame cerebral.

Los resultados revelaron que:

- Beber una o dos bebidas alcohólicas por día aumenta el riesgo de apoplejía en un 10-15%.

- Beber cuatro bebidas cada día aumenta el riesgo de sufrir un derrame cerebral en un 35%.

El estudio realizado por investigadores de la Universidad de Oxford, la Universidad de Pekín y la Academia China de Ciencias Médicas, participaron más de 500 mil hombres y mujeres en China, a quienes se les preguntó sobre su consumo de alcohol y se les hizo un seguimiento durante diez años.

 

Disfagia: una realidad presente tras el ACV

Las complicaciones tras un ACV nos siempre son iguales para todos los pacientes, pero hay algunos elementos en común como por ejemplo la disfagia, un problema para deglutir los alimentos, líquidos y en caso más extremos incluso hasta la saliva.

 

Se estima que esta afección afecta al 50% de las personas que sobreviven a un Accidente Cerebrovascular. Si bien, un amplio porcentaje recupera la función de deglución en un promedio de 7 días, hay alrededor de un 11% a 13 % que sigue presentando esta condición a los 6 meses. Se estima que la disfagia y el déficit nutricional tras un ACV aumentan un 50% el riesgo de neumonía y un 37% el riesgo de muerte, es por eso que la evaluación del paciente en las primeras 24 horas tras el ataque cerebral es muy importante.

 

Es ante este escenario que se debe fortalecer el trabajo de las unidades de rehabilitación que permitana  los pacientes de ACV tener una mejor calidad de vida. 

Aún quedan días de calor ¿Cómo se relaciona con la Hipertensión?

Durante el verano, la dupla calor – presión arterial elevada, tiene el potencial ser peligrosa para los pacientes. ¿La razón? Al contrario de lo que se podría suponer, las altas temperaturas no producen mayor hipertensión, sino que más bien provocan vasodilatación, vale decir, tendencia a disminuir la presión arterial.

Si un hipertenso que toma medicamentos para bajar su presión está expuesto a un calor excesivo, puede sudar más y perder más líquido, por lo que las venas también se dilatan y se genera un ‘pooling venoso’. Esto se traduce en un mayor volumen de sangre en las extremidades inferiores, lo que puede llevar a una hipotensión con mareos, sensación de fatiga, cansancio o incluso desmayos.

Lo recomendado entonces es, hidratarse, sostener una dieta con poca sal y baja en grasas, sumado a una medicación adecuada y un estilo de vida saludable, pueden disminuir la presión arterial y, más importante aún, reducir la alta probabilidad de padecer un ACV derivado de la hipertensión.